¿Alguna vez se han preguntado a donde van las almas de los niños que no lograron ser juzgados? Los envían a un lugar fabuloso llamado el panal! con una torre en el medio donde el espíritu del fuego nos cuida a toditos, nos entrenan hasta que aprendamos a volar... porque ahora somos ángeles en entrenamiento! en un entorno feliz y dulce como el chocolate...