Toda princesa tiene a su fiel caballero. Pero, ¿Qué pasa cuándo la princesa es tan temeraria que no necesita protección? Virelia, la escolta real tendrá que descubrirlo. Su trabajo no es nada fácil, pues sus servicios no son aparentemente requeridos. Es así, que entre dilemas existenciales y aventuras junto a la princesa, descubre que proteger a alguien se trata de más que sólo fuerza y espadas.